Con Autobuses Santa Fe fundida, los colectivos seguirán parados


Hace 15 días que en Santa Fe no hay servicio de colectivos urbanos. La crisis en el sector es inédita: los trabajadores quieren cobrar, los empresarios no tienen fondos, el estado no quiere compensar la falta, y lo más tenebroso de todo: no hay pasajeros para aliviar la crisis.

En diciembre de 2019 Autobuses Santa Fe -la empresa que más lineas de transporte urbano opera en la ciudad capital de la provincia- presentó un primer procedimiento preventivo de crisis ante el Ministerio de Trabajo de la Provincia. Hoy, la concesionaria plantea la necesidad de despedir al 20% de sus 731 empleados, suspender al 40% de la dotación y dejar trabajando al restante 40%. Esto significa 140 despidos y 280 empleados con sus sueldos reducidos.

Trabajadores y empresarios fundidos.

En palabras de Lucas Fernández, el gerente de la empresa: "Estamos fundidos. Si no aparece dinero no podemos seguir. Si seguimos esperando quebramos y dejamos en la calle a todo el personal. Esto busca salvar algo", y luego agregó una inquietud respecto del apoyo a la crisis en el sector: "El gobierno nacional paga la mitad de los sueldos en empresas, industrias, hasta en los casinos. Pero no entendemos por qué no lo hace con las empresas de transporte que brindan un servicio esencial", y sostuvo con determinación las medidas que anunciaron respecto a la planta de trabajadores: "Si estas medidas no se aceptan, la empresa tendrá que avanzar igual. Ninguna ley puede obligarte a fundirte".

Por su parte el representante de UTA, Osvaldo Agrafogo, que nuclea a los trabajadores del sector, dijo esta mañana que "saldremos a la calle a reclamar. Los trabajadores no tienen ya para comer. No vamos a permitir que nos dejen en la calle. O nos quedamos todos o nos vamos todos. Que el gobierno prepare cárceles para meter a los trabajadores, porque vamos a reclamar".


Costos y cambio de hábitos

Según el representante de Autobuses Santa Fe, el pago de sueldos se lleva el 70% de los recursos de la empresa. "El sistema de transporte tal como lo conocemos no vuelve más", advirtió.

Así como llegó un cambio de hábitos por el coronavirus, seguramente no se podrá retomar el servicio como era antes. Podrá subir menos gente a los colectivos. Hay que repensarlo", planteó Fernández.

A las 11 de la mañana, Autobuses Santa Fe está citado en la Secretaría de Trabajo para analizar esta situación. A las 9,30, la reunión será con Atap, que representa a las líneas de media distancia.


Subsidios que no alcanzan, subsidios que no llegan

La situación de emergencia en el transporte puso una vez más de manifiesto cómo el Estado Nacional hace una injusta distribución de recursos.
El subsecretario de Transporte de la Municipalidad de Santa Fe, Lucas Crivelli, confirmó el viernes de la semana pasada que Buenos Aires y Gran Buenos Aires recibieron 18 mil millones de pesos de subsidios en sólo un mes; mientras que al resto de las ciudades del país se enviaron apenas 6 mil millones durante todo el primer cuatrimestre de 2020.

Capital Federal y el Conurbano representan un conglomerado con nada menos que 13 millones de habitantes. En esa región también se cuenta con diversidad en modos de transporte público urbano además de los colectivos, precisamente subtes y trenes, con costos iguales o menores que el ómnibus.
En cuanto a los costos de los empresarios, en el AMBA suele ser de mayor rentabilidad o menor déficit, dada la mayor concentración de población. 

En resto de los distritos habitan 32 millones de argentinos. Muchos de ellos, en las principales ciudades donde el servicio de transporte también resulta esencial. Sumado a eso con contadísimas excepciones, en el resto del país el único transporte público urbano disponible es el ómnibus, y de no disponerlo se debe recurrir a taxis y remises, de mucho mayor costo para el usuario.

Al revés de lo que resulta necesario, el 30 de abril caducó el convenio por el cual el gobierno nacional enviaba subsidios al transporte por colectivos de Santa Fe. Desde entonces, los aportes nacionales dejaron de llegar y la ecuación que sostenía con serios inconvenientes el esquema terminó de derrumbarse. Fuentes oficiales vinculadas con el área de Transporte aseguran que en la ciudad de Santa Fe el sistema pierde más de 1.500.000 pesos por día.

Con información de Aire Digital

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