La conductora del automóvil quedó atrapada con vida en el interior del habitáculo mientras que policías capitalinos de Orden Público y de Cuerpos, especialistas del Cobem municipal y médicos del SIES 107 realizaban las maniobras para sacarla de dentro del auto.
Ante el caso, y que públicamente se puso en cuestión el funcionamiento de las barreras automáticas, se aclara que la Ley Nacional de Tránsito indica a los conductores viales, mediante la Cruz de San Andrés, el "pare mire y escuche" por peligro de cruce de trenes. La empresa ferroviaria ha dispuesto barreras automáticas las cuales actualmente no funcionan, pero que su presencia no implica que cese la obligación de los conductores de frenar ante el paso de una formación ferroviaria.
Varios de esos vecinos fueron los que llamaron a la central de emergencias 911 y pidieron auxilio. Los oficiales y suboficiales de guardia en las Comisarías 8°, 5° y 26° -Orden Público- de los barrios Guadalupe, Sargento Cabral y Nueva Pompeya como los del Comando Radioeléctrico capitalino -Cuerpos- llegaron en patrulleros con sirenas y con balizas encendidas al lugar y descubrieron que la conductora del Toyota bordo (chapa patente AC 123 LH) estaba atrapada en el interior del habitáculo.
Los policías dialogaron con la mujer y le llevaron tranquilidad mientras intentaban doblegar los hierros retorcidos para poder extraerla. Justo en ese momento llegaron especialistas del Cobem municipal con herramientas de corte y expansores. También llegó una ambulancia con un médico del SIES 107.
Los oficiales policiales de Cuerpos y de Orden Público que actuaron en el lugar mantuvieron a la formación ferroviaria detenida en lugar, establecieron que procedía de la ciudad de Laguna Paiva, identificaron al conductor, y además intentaron ubicar a cámaras de videovigilancia que contuviera las imágenes sobre cómo se produjo el choque, además de la identificación de los testigos que estuvieron durante la ocurrencia del violento impacto y posterior violento arrastramiento por espacio de una cuadra.
Procedimiento de rescate
El estruendo del impacto del choque y los hierros rascándose en las vías ferroviarias, alertaron las miradas de las personas que transitaban en inmediaciones de la calle Javier de la Rosa en dirección al oeste, casi calle Dorrego, en barrio Guadalupe Oeste. Un tren del Belgrano Cargas chocó y arrastró un automóvil bordo con una persona en el interior unos 100 metros hasta que el maquinista logró detener la marcha.Varios de esos vecinos fueron los que llamaron a la central de emergencias 911 y pidieron auxilio. Los oficiales y suboficiales de guardia en las Comisarías 8°, 5° y 26° -Orden Público- de los barrios Guadalupe, Sargento Cabral y Nueva Pompeya como los del Comando Radioeléctrico capitalino -Cuerpos- llegaron en patrulleros con sirenas y con balizas encendidas al lugar y descubrieron que la conductora del Toyota bordo (chapa patente AC 123 LH) estaba atrapada en el interior del habitáculo.
Los policías dialogaron con la mujer y le llevaron tranquilidad mientras intentaban doblegar los hierros retorcidos para poder extraerla. Justo en ese momento llegaron especialistas del Cobem municipal con herramientas de corte y expansores. También llegó una ambulancia con un médico del SIES 107.
Los oficiales policiales de Cuerpos y de Orden Público que actuaron en el lugar mantuvieron a la formación ferroviaria detenida en lugar, establecieron que procedía de la ciudad de Laguna Paiva, identificaron al conductor, y además intentaron ubicar a cámaras de videovigilancia que contuviera las imágenes sobre cómo se produjo el choque, además de la identificación de los testigos que estuvieron durante la ocurrencia del violento impacto y posterior violento arrastramiento por espacio de una cuadra.
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